Bien, ya tengo asegurado que por fin estudiaré Bellas Artes en Cuenca. Dos años de resentimiento llegan a su fin y no sé ni cómo sentirme. Puede que me vaya muchísimo mejor que en el pueblacho (todo el mundo sabe que lo odio, y muchos me lo echan en cara), pero es que no soporto más aquí, no encajo. Allí espero conocer sitios y gente con la que sentirme mejor. No digo que con los de ahora me sienta mal, pero vistas las circunstancias de la semana pasada, solo me encuentro bien con los que me he encontrado siempre.Por fin podré desplegar todo mi arsenal creativo y no me faltará ayuda, todos los días olerán a aguarrás y no me quejaré, estaré haciendo lo que siempre he querido hacer. Ay, qué calvario he tenido que soportar... Siento que me abro hacia una nueva etapa de mi vida, muchos dicen que es la mejor y yo espero que así sea. Por fin podré salir a pasear por el Júcar cuando me plazca, o ir a sitios donde nunca iría con mis amigos del pueblo. Es maravilloso.
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